CIUDAD PIAR Y LA CASA VERDE

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Ciudad Piar en sus inicios fue algo así como un campo de batalla, donde a todo hora la tierra se estremecía por las explosiones con las cuales ingenieros, técnicos y obreros trataban de medir el espesor y profundidad de la montaña de hierro en cuya falda vivía la gente apiñada, atormentada por noches y madrugadas, con el grito angustiado de la fauna, mientras una nube rojiza de polvo cubría el ambiente y todos por las noches iban a sacudirse, a drenarse, en la “Casa Verde” siempre animada por atractivas mujeres a las cuales se les permitía ejercer la más antiguas de las profesionales con una cédula de identificación que decía “apta” o “no apta”, expedida por el Doctor Suquilanda. >quien tenía su equivalente en el doctor Sergio Karovich, médico vienés naturalizado guayanés, y experto en enfermedades venéreas.